miércoles, 2 de julio de 2008

RASPBERRIES - Raspberries (1972)



Cuando se empieza así no hay nada que decir. "Raspberries" empieza con un riff chulísimo, de puro rock and roll del tipo de los Rolling Stones. Y cuando empiezan a cambiar, la cosa cambia. Las melodías son empalagosas, en la tradición de los sesenta, pero la vigorosa y potente base ahí se mantiene y hace de "Go all the way" un pequeño clásico olvidado de los años setenta, que parecen revivir cada vez que alguien hace sonar este tema.

Raspberries sacaron cuatro discos entre 1972 y 1974, de los cuales por ahora sólo he escuchado este, su debut, y no me cuesta demasiado decir que me gustan todos. Parece ser de esos grupos que uno no tiene prisa por escuchar porque sabe que no van a decepcionarle con un 0,1 % de error, y estos refugios, por más que puedan ser abundantes en el rock clásico, no deja de ser una gran alegría encontrar uno de ellos.

"Come around and see me"
y "I saw the light" siguen con esas melodías tan especiales, que beben tan directamente de los Beatles, de los Hollies, de los tiempos en los que el término pop no era entendido por mucha gente como música facilona de usar y tirar, en un formato más acústico, incluso folk por momentos. Con "Rock & roll Mama", como indica su nombre, se acercan a un estilo más rockero. Pese a que podría decirse que suenan, simplemente, a su tiempo, no logran que me saque de la cabeza a Jagger, Richards y compañía. Es un excelente tema alegre, no demasiado cañero, comedido, que sin grandes alardes te hace mover el pie y las caderas sin que llegues a dar cuenta.

Siguen los contrastes en este disco con "Waiting", una balada de piano que quizá empalaga un poco por los arreglos de cuerda, que pese a todo no están añadidos con mal gusto. "Don't want to say goodbye" es otra balada que viene a continuación, y tiene un acompañamiento similar basado en cuerdas, aunque está interpretada por toda la banda y el estilo recuerda a Elton John.

Bastante más afortunados son los arreglos orquestales, para los cuales el productor se inspiró en Phil Spector, para el tema "With you in my life", que sigue, aún siendo la banda estadounidense, la mejor tradición del brit-pop sesentero de los Kinks. "Get in moving" es el otro tema claramente rockero del disco, de corte similar a "Rock & roll Mama". Aunque se agradece la variedad del disco, creo ciertamente que es en temas así donde encontramos lo mejor de los Raspberries, al menos en su debut. Las hermosas melodías resaltan más acompañadas de potentes guitarras que tratando de sostener el tema ellas solas y los solos de guitarra son bastante buenos, y en temas así es donde mejor lucen.

El disco termina con un tema largo y épico, "I can't remember" que dura unos ocho minutos. Un tema que sigue los clásicos patrones de empezar como una balada e ir adiquiriendo mayor potencia, que pese a todo es bastante efectivo. No acaba de parecerme la pieza definitiva del disco, pues me posiciono más junto a otros temás más directos, pero no deja de ser una gran canción.

En general "Raspberries" puede no ser un disco impresincible, pero sí altamente aconsejable para los enamorados de la música de los setenta, etiqueta que supuestamente engloba a la gente que espero que lea este blog. Me gustaría dar un par de curiosidades para terminar: la primera es que supuestamente, es la primera banda para la cual la prensa utilizó la etiqueta power-pop. La otra es que uno de sus componentes, Eric Carmen, tuvo un importante single en solitario llamado "All by myself", que más tarde popularizó Celine Dion. Sí, es como lo que pasó con "Without you" de Badfinger y la versión de Mariah Carey. Si es que el power-pop está maldito.

1 comentario:

Martin Ruete dijo...

Hola. Che, por casualidad tendrias este disco? no lo consigo en internet, bueno, si podes ponelo. desde ya gracias